Ser distribuidor o distribuidora, significa que te vas a convertir en tu propio jefe, aunque en realidad se trata de un término que se utiliza mucho en los negocios. A parte de esto hay que, saber escuchar ser amable, sonreír interior y exteriormente. Porque nadie nace aprendido.
Para ser un buen distribuidor o @, hay que tener mucha paciencia y ser persistente, y marcarse un objetivo.
- Tener una agenda ordenada.
- Tener una mentalidad positiva, y de líder.
- Hay que tener ganas de trabajar, tener entusiasmo en el trabajo.
- La motivación es un aspecto clave de tú negocio.
Se debe intentar descubrir cómo sacar el máximo provecho de los productos que se van a promocionar para así saber cómo enfocarlo a las personas que van a comprar.